A petición de mis “fans“ debo informarles que mi computadora ¡ha resucitado! No es que no me haya dado gusto tenerla conmigo de nuevo. Al contrario, sigue siendo mi eterna compañera. Solo que ya me acostumbré tanto a tenerla conmigo, que es tan parte de mí, que no sé como decirles que me olvido que existe.
Es como si perteniera al entorno, a mi paisaje del diario vivir. A veces ya no la considero necesaria y fue hasta que desapareció que me di cueta cuánto la necesitaba. Pero pobrecita de mi negra, porque ya está de regreso y sigo ignorando su presencia. Vaya destino de computadora.
Bueno robert, espero que te des por satisfecho con mi post.
1 comentario:
yeay! :) tu negrita merecía su regreso oficial… :P
es muy cierto lo q dices de que nos 'olvidamos q existen' estas 'nobles' máquinas… He estado sin mi PowerBook hasta ahora porque mi cable para cargar la batería se murió. Al fin hoy me prestaron otro cable y pues con mucho gusto y cariño la he vuelto a abrir a mi viejita :)
take care mer…
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